Entendiendo este blog enfocado al objeto de la pregunta como mecanismo de diálogo, nos planteamos la cuestión sobre un punto de partida que sea seguro para establecer un marco de referencia consciente.

Si te detienes a desglosar la realización del acto científico, el mismo siempre parte de los ojos de un ser humano que no puede verse la cara a sí mismo, si no es a través de otro u bien utilizando un objeto reflexivo.

El día de ayer, el Dr. Rodrigo Esparza Parga, Filósofo, presentó su charla sobre lo que implica adentrarse en el Posthumanismo Existencial. En la cual, plantea realizarnos la pregunta autoreflexiva y entonces permitirnos reconocer lo que somos.

¿Por qué requerimos el Posthumanismo Existencial y no más del Humanismo?

Este es uno de los contrastes que el método científico no puede diseñar de manera directa. Justamente, merece en primer lugar un acto cualitativo de aceptación de lo que va a ver y reconocer para poder transformarlo, si ese fuera un fin.

De acá que la psico-bioestadística, pueda aportar como un puente interpretativo entre la naturaleza y los artefactos que diseñamos para construir nuestra forma de vivir la vida y de crear cultura.

Reconocerme como el observador, resulta como un paso fundamental en todo sentido para poder proponer nuevos diseños sociales que permitan enriquecer el potencial humano integrado en la naturaleza.

Este marco nos permitirá bordar los conceptos actuales de Universidad y Energía Nuclear. Así construimos un contraste que plantee una forma de tomar decisiones en función de las nuevas formas culturales que queremos proponer y dejando atrás dilemas construidos que actualmente se observan como decadentes.